Esta Carta de Duret, que ahora publica Bohodón
Ediciones, es la que debiera haber recibido la
h?a de un humilde comerciante francés,establecido
al norte de la frontera pirenaica cuando
estalla laguerra civil en España. Hombre timorato
y pusilánime, Charles Duret es capaz sin
embargo de hacer todo tipo de cosas por supequeña
familia. Y de hacerlas, desde luego, calladamente.
Comoel perfecto espía que no era.