La ausencia clamorosa de posiciones críticas por parte de la inmensamayoría de las organizaciones de la izquierda, tanto institucional,como extraparlamentaria, ante las numerosas y graves irregularidadesque caracterizan la gestión de la pandemia, no sólo ha dejado sinreferencia alguna a los colectivos más conscientes de la clase obreray del pueblo, sino que - de no reaccionar a tiempo - les inhabilitapara representar eficazmente la resistencia de las clases popularesante las consecuencias de la gran reestructuración del capitalismo encurso.