Una vez más la lucha, una vez más el fuego. Una vez más hay que salir a la calle, o quizás no, que cada cual elija su estrategia, se aposte donde pueda hacer más daño. Recomienza la búsqueda, a ratos investigación, a ratos batida. Como tantas veces en la historia, no hemos recibido ningún comunicado, ni falta que hace. Conocemos los medios con los que contamos y las mediaciones que nos debilitan. ¿Representación? Impresentables. Para los que no quieran entender, no hay explicaciones: este libro no se las dará y este editor no se esforzará en seducir a ningún despistado desde el texto de contracubierta.