El alegato de Hallett en las causas de Rhode Island constituye uno delos mejores ejemplos de los diferentes caminos que en el siglo XIXadoptó el constitucionalismo democrático en el largo proceso deafianzamiento de la soberanía popular. Sus fundamentos construyen unadefensa universal sobre el derecho que tiene todo pueblo de aprobar su propia Constitución. El pueblo de Rhode Island, cuando trata decambiar su Constitución a través de una Asamblea Legislativacontrolada por terratenientes blancos elegidos por hombres blancos,choca frontalmente contra ella y emprende el camino de preguntardirectamente al pueblo. Es un camino completamente opuesto al europeo, en el que un rey, o en el mejor de los casos un parlamento, otorga al pueblo una Constitución y le inquiere a aceptarla, pues laalternativa es la nada. Esa fue la doctrina impuesta en Europa por sus santas alianzas y su restauración, y que impidió durante décadas elavance democrático, frente a la doctrina americana que trató connumerosos obstáculos que la voluntad del pueblo prevaleciera. EnEuropa, desde el infame Congreso de Viena de 1815, se