De todos los intentos de acabar con la II República dos de ellos tienen una significación especial, la sublevación de agosto de 1932, generalmente conocida como "sanjurjada", y la insurrección revolucionaria de octubre de 1934 en sus dos manifestaciones, la proclamación del Estado Catalán, y la insurrección revolucionaria prevista para toda España, pero que sólo se materializó en Asturias. Estos acontecimientos presentan diferencias significativas en el contexto en el que se produjeron, en sus causas estructurales, en sus protagonistas, en los objetivos que éstos perseguían y en las consecuencias que uno y otro produjeron. Sin embargo, junto a esas diferencias podemos apreciar similitudes también significativas; una de ellas es que en uno y otro caso se justifican por la imperiosa necesidad de SALVAR LA REPÚBLICA que da título al libro. Otra coincidencia es la falta de conciencia democrática que caracteriza ese periodo que conocemos como de "entreguerras" y en el que las posiciones políticas y la sociedad entera se polariza en torno al fascismo y al comunismo en detrimento del modelo de democracia parlamentaria. España no iba a ser una excepción y también se vio afectada por esa "anemia democrática", anemia que afectó a ambos acontecimientos, condicionándolos. Este libro analiza esas diferencias y similitudes, así como las diferentes interpretaciones que de ambos hechos se han producido en la historiografía en diferentes etapas.