En Viejo, su cuarto libro, el poeta Sergio Gómez reflexiona sobre elinexorable paso del tiempo y lo inevitable de la decadencia física.Con una poesía sucinta y esencial, Viejo es la constatación de que lamuerte existe, de que todo lo vivido es irrepetible. Viejo contienevoces que hablan del dolor, de las pérdidas, de los miedos y de lasreconstrucciones, afrontando el yo con la esperanza de que ese yo noexista más que en sus representaciones y de que la vejez sólo sea unamáscara más en la que vivir. Uno de los poemas del libro, «Atraccio´nde la tierra»: Tajo en la luz, mis ojos hacia los ojos de la roca. Hay habitantes en las paredes del vaci´o, caras que regresan a sualiento. Su casa es esta noche de mi sangre. Al fondo del aire roto,la memoria: la tierra amontonada entre los huesos que me esperan.