Este es un libro de intervención, un libro que toma partido: por el cine y por la educación. Es también un libro de reflexión, sostenido por una experiencia de más de veinte años. Y un libro, por último, que no renuncia a ofrecer propuestas concretas para una iniciación a la pedagogía del cine. La hipótesis del cine afirma que "no hay que olvidar que el cine es primero un arte, que es también una cultura cada vez más amenazada por la amnesia, y que es finalmente un lenguaje y, como tal, necesita de un aprendizaje". Pero ¿qué tipo de aprendizaje? El arte tiene un lugar de excepción en la enseñanza, porque el arte no se enseña, pero sí que se encuentra, sí que se experimenta. ¿Cómo favorecer en las escuelas el encuentro con el cine, la experiencia del cine? Una de las cuestiones principales que Alain Bergala enfrenta en este libro es cómo introducir el cine como arte en el marco escolar, sabiendo al mismo tiempo que el arte es, y debe seguir siendo, un fermento de cambio profundo de las instituciones. ¿Cómo escoger las películas que se van a mostrar a los alumnos? ¿Cómo exponer a los niños al encuentro con el cine? ¿Qué aporta el DVD? ¿Se debe hablar de cine y de televisión en las escuelas? La pedagogía del cine, ¿pasa necesariamente por situar a los alumnos en la posición de realizadores? ¿Cómo sería un análisis de las películas orientado a iniciar en la creación?