Este libro es una propuesta con altas dosis de radicalidad, donde sepretende entablar un diálogo ?así como suscitar el consecuente debate? entre los aportes de la Teoría de la Ciencia, y la Teoría de laEducación, huérfana sin duda de un enfoque radical. Con ello sepretende averiguar hasta qué punto la Teoría de la Educación tieneverdadera consistencia teórica.
Este ejercicio trae a colacióntanto las aportaciones de Mario Bunge y Karl Popper como las actualesteorías de la complejidad. Realizar tal ejercicio supone criticar elantiguo concepto de Pedagogía y la carga axiológico-moral que impedíaactualizar sus enfoques. A partir de aquí, se intentan descubrir losfundamentos teóricos de los estudios educativos y plantear el papelque pueden jugar los modelos científicos en la racionalidadeducativa.
Asimismo, se analiza cómo la materialidad educativa, laperspectiva tecnológica, la reflexividad, la complejidad y lahipermedialidad actual afectan a la Teoría de la Educación.